EL PISCO DE MORO

El Historiador Fernando Bazán Blass ,nos anima con sus investigaciones ,a seguir creyendo que el Pisco de Moro deberia tener el reconocimiento de Denominación de Origen ,y no seguir marginados de los reconocimientos que si disfrutan,los productores del Sur.
En el pueblo de Moro del valle de Guambacho, donde se cultiva la vid, desde épocas coloniales se elaboraba aguardiente de uva de fermentación exclusiva de mosto selecto, destilado en alambiques artesanales. Los primeros españoles que se asentaron al lado del río Santa y el valle de Nepeña (Guambacho) se dedicaron a esta actividad, así lo demuestran los trapiches para caña y uva de Andrés Chacón en Moro, Francisco Arroyo en Guambacho, Andrés de Irrizábal en Santa, Alonso López en Santa, Juan Ortiz, Pedro Valdez, Pedro Beltrán, Amador Bonilla y otros, en el valle de Guambacho y Santa, desde mitad del siglo XVI.[1]
El aguardiente de uva, licor conocido o denominado pisco peruano, tiene estrecho vínculo con la naturaleza del suelo y clima de zonas propicias para el cultivo de la vid. Ese clima y tierra feraces, fueron y son la que posee el valle de Nepeña, Moro y Motocachi.
La doctrina de Nepeña, con su anexo Motocachi y la doctrina de Moro, situados en el valle de Guambacho, (Nepeña) del corregimiento de Santa, abastecían de azúcar, tapas de chancaca envuelta con tallos secos de totora, aguardientes de caña y de uva, y vinos en botijas de madera, a todo el interior de los corregimientos de Huaylas, Conchucos, Huamalíes, etc. hasta dar al Marañón. Las piaras con 30, 40 o 50 bestias subían por caminos de herradura de Moro a Pamparomás coronando la Cordillera Negra para bajar al Callejón de Huaylas. Por el puerto de Santa, único puerto autorizado en esta zona, se exportaba los mismos productos a Valparaíso, Guayaquil, Panamá y España. De Santa a Nepeña había un camino directo desde el tiempo mochica.
El historiador Lorenzo Huerta Vallejos, en su estudio sobre “Historia de la producción de vinos y piscos en el Perú”.[2] , publicados en internet, ha cerrado los ojos a la extensa documentación existente en el Archivo General de la Nación, Dirección de Archivo Colonial, sobre la presencia de los pueblos GUAMBACHO, NEPEÑA, MOTOCACHY Y SANTA, mencionando solo a Santa María de la Parrilla. Ignorando a Moro, Motocachi y la hacienda de los jesuitas en el valle de Nepeña, como es de ver, en el mapa de “Centros de producción de uva en 1560, de acuerdo a crónicas, protocolos y otros documentos”; y sus tablas de “Población de algunas provincias vitivinícolas tomadas del -Cuadro general del censo de 1795”.
Obviamente, tampoco hace mención, el Dr. Huerta, de importantes personajes que visitaron y comentaron la dedicación vitivinícola de Moro y Motocachi, como el paso del Dr. Ernesto Middendorf en 1886, o la visita de estudio del sabio Antonio Raimondi, quien sobre Moro y el valle de Guambacho en 1868, entre otras cosas, escribió:
“El distrito de Moro situado a continuación del de Nepeña, quebrada arriba, comprende a los pueblos de Moro y Jimbe. Esta Población más grande que Nepeña, se halla en un terreno llano entre dos quebradas que por su reunión forman la de Nepeña, Moro dista de esta última población casi cinco leguas; tiene regulares casas, abundantes recursos, hermosa campiña y vecinos acomodados. Su elevación sobre el nivel de mar es solamente 345 metros (412 varas) y por consiguiente su clima es muy cálido….Los habitantes de Moro se dedican a la agricultura y especialmente al cultivo de la parra. ..Las principales producciones consisten en vinos, aguardientes… que exportan alCallejón de Huaylas”. [3] Raimondi describió los alambiques dando sugerencias para mejorar la producción.
Cuando se fundó la villa de Santa en 1556, la villa de Pisco todavía no estaba fundada, para entonces solo había San Gallán. Esta villa (Pisco), nombre quechua que significa "pájaro" fue fundada en 1640 en un antiguo asiento indígena del mismo nombre, al costado de un río, relacionado con la extracción de guano de las islas, por donde se embarcaba azogue y plata extraídos de las minas de Huancavelica y Castrovirreina. Como todo puerto, en las bodegas y fondas del lugar, se servía este exquisito aguardiente de uva contenida en botijas de arcilla llamadas piscos, por la forma del cuerpo de pájaro “pishgo”, lo que posteriormente pasó a ser la raíz toponímica de la villa de Pisco.
Pisco, es un topónimo de lugar derivado de pájaro, no de aguardiente de uva, el pisco ya se elaboraba con su aroma y textura especial en los principales viñedos de la colonia, llámese Ica, Cañete y otros, aunque no fuera conocido en aquella época como pisco. Por lo mismo, este aguardiente de uva de mosto especial producido en lugares que no fueron Pisco; tampoco les asistiría derecho a esta denominación.
Como dijimos, estas botijas de arcilla, en forma de pájaro con pico en el extremo, eran los piscos donde se guardaba el licor; por último, era utilizado sin distinción para licores de cualquier variedad y calidad. Eran depósitos.
En 1772, el visitador general de la haciendas de Temporalidades de la provincia de Santa, informa que “En la hacienda de Santa Gertrudes de Motocachi… descendieron las botijas grandes de aguardientede ochocientos treinta y seis pisquillos a ciento veinte y cinco y las botijas de vino a ciento sesenta y cuatro,…el administrador lo atribuye al corto número de negros lampas que hay en la hacienda para el debido cultivo…” [4]
Moro y Motocachy, también podrían reclamar paternidad de la denominación del “pisquillo” semejándolo al licor exquisito de uva de Motocachi; y que como primero es el niño y después el adulto, primero fue el “pisquillo” y después el “pishgo”, “pishco o pisco”; más tierno, más sabroso, mejor calidad.
En el mapa de Diego Méndez de 1574[5], aparece el nombre de Pisco por primera vez en el Perú. Si bien este es el primer mapa del Perú donde está Pisco, no fue el primer mapa que se hizo del Perú y publicó. Desde 1527 se contaba con mapas y portulanos como, por ejemplo el mapa de Pedro Cieza de León publicado en el año de 1554 en Ambers, en donde no existe el nombre de Pisco. Sí, más bien, aparecen los nombres de Trujillo, Santa y Ferrol. [6], por lo tanto es necesario establecer que el mapa de Diego Méndez no le da primacía a Pisco ya que en dicho mapa también se menciona a Santa.
Cuando Pizarro emprende el descubrimiento del Perú en 1524 se había prescrito ya a los conquistadores que lleven pilotos y veedores que hagan: “discripción” (sic) y la “figura” de la tierra. Pizarro trajo consigo a Hernán Pérez Peñate y a Bartolomé Ruíz con este propósito; también venían naturales, como Felipillo o Fernandillo, que iban indicando los nombres de los puntos importantes y pueblos de la costa; “Los que debieron tomar el contorno costero de la región de los manglares y de las barbacoas” [7].
El mapa de Cieza se titula América y el Estrecho publicado en Ambers en 1554[12], anota a Trujillo, Sancta y Ferrol, que es la provincia donde se halla Guambacho y Moro.Por lo tanto, si se tratara de antigüedad, en 1556, con más de 20 años de los españoles en el Perú, ¿existía o no el aguardiente de uva conocido después como “pisco”? o no existía el pueblo de Pisco como denominación, el cual aparece en 1574 como un puerto de tránsito para la embarcación de minerales de Huancavelica, en donde los marineros gustaban del “pisco”. Si Pisco hubiese existido siquiera como comunidad nativa, los naturales que viajaban a bordo de las naves de Pizarro, lo hubiesen mencionado, no existía entonces el pueblo de Pisco, Nicolás de Rivera “El viejo” fundó San Gallán antes de la villa de Pisco.
Estas son interrogantes que para nosotros tiene respuesta clara,el pueblo de Moro, de creación española, fue primero que el pueblo de Pisco y en estos pueblos de Nepeña, Motocachy y Moro, la primera y principal industria artesanal fue el azúcar, el vino y el aguardiente de uva guardado en piscos y pisquillos.
Es indispensable pues, revisar el giro conjuntivo de la oración gramatical que hace el historiador Huerta, como presidente de la Academia del Pisco, en la denominación del origen del pisco, porque los productores de pisco de Ica no dicen aguardiente de Ica, como en el mismo caso deberían decirlo, no deben decirlo, claro está, es el pisco de Ica; tampoco se debe arrinconar a Moro a vender aguardiente de Moro sino pisco de Moro o como lo es y ha sido el tan conocido pisco de Motocachi.

Chimbote, 9 de octubre del 2011

Fernando Bazán Bass
Femarey@hotmail.com

Podran ver sus investigaciones completas en su pagina web : http://historiadechimbote.es.tl/HISTORIA-DEL--ORIGEN-DEL-PISCO-DE-MORO-Y-MOTOCACHI.htm ..SEGUIR LEYENDO....